Enero 2015, M.Casat - Evangelizar con el Arte Arte Fe y Cultura

Cuadro Enero 2015 : Mary Cassatt (1844-1926)

De la exposición" Impresionismo Americano" en el Museo Thyssen

Hasta 1 Febrero 2015

Mary Cassatt. Mother holding a child in her arms.1890. Trabajó con extrema sensibilidad escenas domésticas, como sus maternidades, en todas ellas subyace,elegante, la expresión de amor,expresivos dibujos de una carrera artística reconocida de forma tardía
Mary Cassatt. Mother holding a child in her arms.1890. Trabajó con extrema sensibilidad escenas domésticas, como sus maternidades, en todas ellas subyace,elegante, la expresión de amor,expresivos dibujos de una carrera artística reconocida de forma tardía

El Thyssen examina la conexión entre impresionismo francés y el americano. Entusiastas creadores norteamericanos como Mary Cassat, descubrieron y adoptaron la frescura, rapidez y espontaneidad impresionista.

Mary Cassatt (1844-1926)" acaso la única impresionista de verdad", es la única norteamericana en exponer  4 veces en Paris. Compartió con Degas, Manet, Morisot...

 Es la primera ocasión para poder contemplar en España una muestra dedicada a la expansión del impresionismo en Norteamérica. Su comisaria, Katherine Bourguignon, rastrea a través de casi ochenta pinturas el modo en que los artistas norteamericanos descubrieron el impresionismo en las décadas de 1880 y 1890 y su desarrollo posterior, en torno a 1900.

En 1886 la primera gran exposición de arte impresionista francés, organizada por el marchante Durand- Ruel, abrió sus puertas en Nueva York. Aunque artistas como Mary Cassatt y John Singer Sargent llevaran algunos años viviendo y exponiendo en Francia y tuvieran una relación muy estrecha con pintores como Degas o Monet, hubo que esperar hasta esta muestra para que los norteamericanos comenzaran a hacer uso de la nueva pincelada, los colores brillantes y los temas modernos del movimiento francés, y se animaran incluso a viajar a París para ampliar sus conocimientos sobre este fenómeno artístico, que luego adaptarían al gusto norteamericano.

¿Donde está la Belleza de la Familia?
Texto íntegro de la Homilía de Don Carlos Osoro, arzobispo de Madrid
Texto íntegro de la homilía de Don Carlo
Documento Microsoft Word 30.7 KB

Las 15 enfermedades...no solo de la Curia

 
 
1. La enfermedad de sentirse “inmortal”, “inmune” o incluso “indispensable” descuidando los necesarios y habituales controles. Una Curia que no se autocrítica, que no se actualiza, que no trata de mejorarse es un cuerpo enfermo. Una ordinaria visita a los cementerios podría ayudarnos a ver los nombres de tantas personas....
 
2. Otra: es la enfermedad del ‘martalismo’ (que viene de Marta), de la excesiva laboriosidad: es decir de aquellos que se sumergen en el trabajo descuidando, inevitablemente, ‘la parte mejor’: sentarse al pie de Jesús
3. También está la enfermedad de la ‘fosilización’ mental y espiritual. Es decir, aquellos que poseen un corazón de piedra y ‘tortícolis’ (At 7,51-60); de aquellos que, en el camino, pierden la serenidad interior, la vivacidad y la audacia y se esconden bajo los papeles convirtiéndose en ‘máquinas de prácticas’ y no ‘hombres de Dios’
 
4. La enfermedad de la excesiva planificación y del funcionalismo. Cuando el apóstol planifica todo minuciosamente y cree que si hace una perfecta planificación las cosas efectivamente progresan, convirtiéndose de esta manera en un contador.
5. La enfermedad de la mala coordinación. Cuando los miembros pierden la comunión entre ellos y el cuerpo pierde su armonioso funcionamiento y su templanza, se convierten en una orquesta que produce ruido porque sus miembros no colaboran y no viven el espíritu de comunión y de equipo.
6. La enfermedad del ‘Alzheimer espiritual’, es decir el olvido de la ‘historia de la salvación’, de la historia personal con el Señor, del ‘primer amor’ (Ap 2,4). Se trata de una disminución progresiva de las facultades espirituales que en un más o menos largo período de tiempo causa serias discapacidades a la persona haciéndola incapaz de desarrollar alguna actividad autónoma, viviendo en un estado de absoluta dependencia de sus concepciones, a menudo imaginarias
7. La enfermedad de la rivalidad y de la vanagloria. Cuando la apariencia, los colores de la ropa o las medallas honoríficas se convierten en el primer objetivo de la vida, olvidando las palabras de San Pablo: ‘No hagan nada por rivalidad o vanagloria, sino que cada uno de ustedes, con humildad, considere a los otros superiores a sí mismo.
9. La enfermedad de los chismes, de las murmuraciones y de las habladurías. De esta enfermedad ya he hablado en muchas ocasiones, pero nunca lo suficiente. Es una enfermedad grave, que inicia simplemente, quizá solo por hacer dos chismes y se adueña de la persona haciendo que se vuelva ‘sembradora de cizaña’.
10. La enfermedad de divinizar a los jefes: es la enfermedad de los que cortejan a los superiores, esperando obtener su benevolencia. Son víctimas del carrerismo y del oportunismo, honran a las personas y no a Dios (cfr Mt 23-8.12). Son personas que viven el servicio pensando únicamente en lo que deben obtener y no en lo que deben dar.
11. La enfermedad de la indiferencia hacia los demás. Cuando cada uno sólo piensa en sí mismo y pierde la sinceridad y el calor de las relaciones humanas. Cuando el más experto no pone su conocimiento alservicio de los colegas menos expertos.
12. La enfermedad de la cara de funeral. Es decir, la de las personas bruscas y groseras, quienes consideran que para ser serios es necesario pintar el rostro de melancolía, de severidad y tratar a los demás -sobre todo a los que consideran inferiores- con rigidez, dureza y arrogancia. En realidad, la severidad teatral y el pesimismo estéril son a menudo síntomas de miedo y de inseguridad de sí.
 
13. La enfermedad de la acumulación: cuando el apóstol trata de llenar un vacío existencial en su corazón acumulando bienes materiales, no por necesidad, sino solo para sentirse al seguro. En realidad, no podremos llevar nada material con nosotros porque ‘el sudario no tiene bolsillos’ y todos nuestros tesoros terrenos –también si son regalos- no podrán llenar nunca aquel vacío, y lo harán más exigente y más profundo.
 
14. La enfermedad de los círculos cerrados en donde la pertenencia al grupito se vuelve más fuerte de la pertenencia al Cuerpo y, en algunas situaciones, a Cristo mismo. También esta enfermedad comienza siempre de buenas intenciones, pero, con el paso del tiempo, esclaviza a los miembros convirtiéndose en un ‘cáncer’ que amenaza la armonía del Cuerpo y causa tanto mal –escándalos- especialmente a nuestros hermanos más pequeños.
 
15. Y la última, la enfermedad del provecho mundano, del exhibicionismo, cuando el apóstol transforma su servicio en poder, y su poder en mercancía para obtener provechos mundanos o más poderes. Es la enfermedad de las personas que buscan infatigablemente el multiplicar poderes y por este objetivo son capaces de calumniar, de difamar y de desacreditar a los demás, incluso en periódicos y en revistas.
 
 
 
Para crecer en santidad y sabiduría...
Texto completo del Papa Francisco-Diciembre 2014
LAS 15 ENFERMEDADES MÁS FRECUENTES.docx
Documento Microsoft Word 32.9 KB
Arriba Vista normal